Como detalle en el post anterior, en las sociedades avanzadas el sedentarismo y la inactividad se han convertido en una pandemia con un grandísimo impacto negativo en la salud de los seres humanos.
En la actualidad, está totalmente aceptado que la actividad física tiene un efecto beneficioso sobre la salud de las personas. Innumerables estudios científicos han demostrado lo beneficioso que puede resultar la actividad física, bien administrada, para poder vivir una vida plena y satisfactoria. Estos son algunos ejemplos de los beneficios que puedes conseguir gracias a lo que a mí me gusta denominar como «la medicina del siglo XXI»:
– menor riesgo de muerte temprana
– menor riesgo de padecer enfermedas cardiovasculares
– menor riesgo de hipertensión arterial
– menor riesgo de diabetes
– menor riesgo de padecer depresión y demencia
– menor riesgo de desarrollar varios cánceres (como el de colón, mama y próstata)
– prevención del aumento de peso graso
– reducción de la osteoporosis
– reducción del estrés
– mejor condición cardiorrespiratoria
– mejor calidad de sueño
– mejora de la imagen corporal
– retraso de los efectos del envejecimiento
– restauración y mantenimiento de la masa muscular y sus niveles de fuerza
– prevención de lesiones articulares
– mayor autonomía para las tareas cotidianas
– mejor estabilidad postural y el equilibrio, disminuyendo las caídas y fracturas
Recuerda que para potenciar estos beneficios deberías de dirigirte donde un profesional cualificado que pueda administrarte la actividad necesaria en su justa medida en función de tus características individuales. Un entrenador personal puede ser la mejor opción para alcanzar tus objetivos de una manera eficaz.
Me gustan los retos. Me encantaría ayudarte a que consigas alcanzar tus objetivos. Si estás buscando un Entrenador Personal en Bilbao y alrededores, ya lo has encontrado. Conóceme, ponte en contacto conmigo y cuéntame cuáles son tus metas. Seguro que puedo ayudarte.